En una emocionante noche de fútbol celebrada en el estadio Santiago Bernabéu, el Real Madrid se impuso al Olympique de Marsella con un ajustado 2-1 en su debut en la Champions League. Desde el inicio, el encuentro estuvo cargado de intensidad y momentos decisivos que mantuvieron a los aficionados al borde de sus asientos. Mientras los merengues buscaban iniciar su camino hacia el título número 16 en esta competición, las sorpresas y giros del partido se sucedieron uno tras otro.
El partido comenzó con desafíos para el Real Madrid
Los locales comenzaron el juego en desventaja, sufriendo la baja del defensor Alexander-Arnold por una lesión muscular apenas comenzadas las hostilidades. A pesar de este contratiempo, el equipo de Xabi Alonso mostró una actitud valiente y decidida en el campo. Con buenos intentos de Mastantuono, quien estuvo activo en las filas del Marsella, los merengues empezaron a sentir la presión de un rival que venía decidido a causar estragos.
Sin embargo, el Real Madrid, con un juego ágil y dinámico, pronto empezó a generar oportunidades. El primer tiempo se convirtió en un torbellino de acciones ofensivas donde la escuadra madrileña registró hasta nueve tiros a puerta, pero fue una equivocación del defensor Güler la que provocó el primer gol de los visitantes. Greenwood se deslizó por el centro, descolocando a la defensa local y dejando a Weah la oportunidad de marcar y poner el 1-0 para el Marsella.
Carvajal y el VAR: Un giro inesperado
A las puertas del minuto 72, el partido tomó un rumbo inesperado con la expulsión de Dani Carvajal. El capitán, en un momento de indecisión, cayó en la provocación de un rival y el VAR no tardó en avisar al árbitro. Con diez hombres y un objetivo claro por delante, el Real Madrid tenía que luchar aún más para revertir la situación.
La reacción del Real Madrid y el protagonismo de Mbappé
Con la aparición de Vinícius, el equipo encontró su impulso. Aunque falló en su primer intento, en la segunda jugada, el brasileño provocó un penalti tras una acción desafortunada de Medina. En ese momento crítico, Kylian Mbappé tomó la responsabilidad y, a los 74 minutos, transformó el penalti que lo llevó a su quinto gol en solo cinco partidos de la temporada, igualando el marcador.
Este empuje revitalizó al Real Madrid, que rápidamente se lanzó al ataque en busca de darle la vuelta al partido. Con un exceso de agresividad y determinación, la escuadra blanca mostró su mejor cara y, en una de las últimas acciones del encuentro, una nueva falta a Mbappé generó otro penalti que sentenció el duelo. Una vez más, el internacional francés no falló y subió el 2-1 al marcador, desatando la euforia entre los aficionados presentes.
El impacto en la clasificación de la Champions League
Con esta victoria, el Real Madrid no solo logró un estreno triunfal en la Champions League, sino que también marcó un precedente alentador para su trayectoria en la competición. Ahora es cuestión de mantener este ímpetu, en un torneo donde cualquier tropiezo puede ser determinante. La mezcla de talento, como el de Mbappé y la solidez defensiva, serán cruciales para seguir adelante en un camino que promete ser emocionante.








