Redacción
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SAN MIGUEL DE ALLENDE. – En el olvido se encuentra la planta de tratamiento de aguas residuales de San Miguel de Allende, esa que hace algunos años se construyó para evitar la contaminación en la principal presa del municipio, la Ignacio Allende y que ante la falta de compromiso y seriedad de los gobiernos locales, estatales y federales, nunca fue funcional, un recurso tirado a la basura y hoy, la presa se enfrenta a la contaminación más grande de todos los tiempos, el lirio acuático que la invade desde hace tres años y que la está secando.
En este artículo publicado por el periódico CORREO, dice que la planta que costó 11 millones de pesos su construcción, nunca se pudo trabajar debido a que los gobiernos, no se interesaron en esta por las dificultades que tuvo su construcción desde que se promovió el proyecto en el año 2000, con el entonces alcalde Salvador García Gonzales.
Que su construcción tardó alrededor de 9 años y la CEAG se la entregó en el 2009 al entonces alcalde Jesús Correa, quien heredó la planta de tratamiento a Lucy Núñez, quien ganó las elecciones en ese año, pero solamente la heredó porque no hizo nada para echarla a andar y atacar el problema de contaminación al que hoy la presa Allende se enfrenta, la invasión del Lirio Acuático.
Ni Lucy, ni Mauricio Trejo Pureco en su pasada administración, quien asumió esta en el año 2012, hizo nada por la planta residual y en la actualidad, va por su segunda reelección y dice que San Miguel de Allende está mejor que nunca, que el municipio no tiene problemas de agua, que él rescató el agua y de la planta de tratamiento ni hace mención.
El caso es que la plata está en el olvido, inclusive incompleta, ya le robaron la tubería, la malla ciclónica y las puertas. Inclusive ya hay gente viviendo en ella, un hombre de la tercera edad que ocupa la caseta de vigilancia, reveló el periódico estatal el CORREO.
Es hasta este 2024, que el tema ha sido puesto en la mesa por la ahora entonces candidata del PAN a la alcaldía de San Miguel, Verónica Agundis, quien entre sus propuestas trae la creación de una nueva planta de tratamiento que costaría alrededor de 179 millones de pesos, una planta con la que se tratarían todos los problemas de contaminación de aguas negras en las principales presas, arroyos y bordos de San Miguel de Allende, y por ende, la reducción del Lirio Acuático que actualmente cubre el 90 por ciento de la superficie del vaso de captación.
Fuente: CORREO
