Redacción
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Hoy tenemos una historia de agradecimiento, el agradecimiento que una chica a la que llamaremos Mary, tiene con dos personas que ayer le ayudaron a encontrar el anillo de compromiso que para ella tiene un gran valor sentimental.
Nos cuenta que ayer, ella se encontraba en el estacionamiento de venta de pollo que se encuentra en la Glorieta de El Pípila, cuando de pronto, el anillo de su compromiso cayó.
Ella siguió caminando y fue minutos más tarde que se dio cuenta que ya no estaba en su mano, por lo que regresó esperando que «un milagro» le ayudara a recuperarlo.
«Regrese con pocas esperanzas de encontrarlo y con la fe puesta en un milagro por el gran valor sentimental que representa para mi ese anillo».
Comenzó la búsqueda que parecía imposible y uno de los vigilantes del establecimiento le ayudó pero los minutos pasaban y no lograban hallarlo.
«Es un anillo que quiero mucho, más que el valor monetario, es mi compromiso con el amor de mi vida», dice Mary.
De pronto apareció un jovencito con un disfraz de pollo, quien los vio desesperados en la búsqueda…él se dirigía a trabajar pero se detuvo para preguntar qué buscaban y ver si podía unirse.
«Fue increíble que en menos de 3 segundo, con una mirada ‘de águila’, en menos de 3 segundos localizó mi anillo de compromiso que se había resbalado de mi mano», dijo Mary emocionada.
Luego de encontrar la joya que simboliza el amor de Mary, el chico disfrazado de pollo siguió su camino sin Mary tener la oportunidad de agradecerlo con el alma.
Por eso Mary nos contó su historia, porque no sabe quién es el vigilante y tampoco el chico-pollo que le ayudó a encontrar algo que parecía improbable poder recuperarlo.
«Pero mi más profundo agradecimiento y admiración a estos sanmiguelenses honestos que me devolvieron mi anillo. Nunca lo olvidaré. Infinitas gracias 😊».
El anillo de compromiso de Mary ya está en su mano y promete que lo cuidará más porque llevarlo consigo es como llevar al amor de su vida siempre a su lado.
