Redacción
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En San Felipe Torres Mochas, José Luis se hizo el desentendido para mantener a su familia y prefirió tomar su vehículo y salir huyendo del municipio guanajuatense.
Sin embargo la mamá de los pequeñitos se puso viva y lo denunció ante las autoridades, indicando que José Luis no había cumplido con sus obligaciones de padre y de asistencia familiar que ya le había distado un Juez de oralidad Penal con sede en San Felipe.
Fue entonces, que cuando circulaba por la Súper carretera Villa de Arriaga- La Pila, las autoridades vigilantes de los caminos le pidieron detener para realizar una inspección de turbina, por lo que no llevaría mucho tiempo.
José Luis accedió y mientras él esperaba, los elementos de vigilancia de caminos se conectaban al Centro de Control, Comando, Comunicaciones y Computo (C4) de San Luis Potosí y ahí se dieron cuenta de que las autoridades judiciales de Guanajuato, andaban en su búsqueda por no cumplir con lo que ya le había dictado el juez para apoyar a sus hijos.
Con su revisión en carretera se supo que José Luis tenía un mandamiento judicial en contra señalada en el estado de Guanajuato, quien a través del convenio de colaboración solicitaba el apoyo de la autoridad potosina para su detención.
Por esa razón, fue trasladado a la Dirección General de Métodos de Investigación para realizar los trámites pertinentes y regresarlo a Guanajuato para que ahora sú cumpla con la entrega de dinerito para mantener a su familia.
El detenido fue llevado a los separos de la corporación para su certificación médica, haciendo posteriormente la entrega física y legal a los policías adscritos a la Dirección de la Policía de Investigación del Delito del estado de Guanajuato, para su posterior traslado a esa entidad federativa.
