Los 3 pueblos de Jalisco que salvan de ser ‘ahogados’ por darle agua a León; Sinhué se enoja y lanza amenaza

Redacción

newssanmiguel@gmail.com

LEÓN.- Esta semana seguramente escuchaste hablar de la Presa El Zapotillo, un proyecto hidráulico ubicado en tierras de Jalisco y que comenzaron a construir hace 14 años… y que aun sigue sin terminar.

Temacapulín, Jalisco.

Esta presa en la que gobierno federal y los gobiernos estata le metieron más de $6mil millones de pesos, tiene como propósito el dotar de agua a Guadalajara y la ciudad de León, la única de todo Guanajuato que se vería beneficada con el proyecto.

Y ¿por qué está detenida? pues porque para ello tendrían que provocar la inundación y desaparición de 3 pueblos llamados: Temacapulín, Acasico y Palmarejo.

¿Qué significa? que las familias de esos lugares tendrían que ser desplazados y enviados a vivir a otros lugares, permitiendo que su pasado, sus muertos, su panteón, su iglesia y la herencia de sus antepasados, quede totalmente bajo el agua.

Hace 4 días, el presidente Andrés Manuel López Obrador visitó Temacapulín, desde donde informó que la obra continuaría, pero no como la planearon «sin consultar a la gente» y se adecuará la presa sólo para dotar de agua a los Altos de Jalisco y Guadalajara pero no para León, porque los pueblos no desaparecerán, no los inundarán y respetarán su vida en ellos.

Ante el anuncio de que NO SE DESAPARECERÁN PUEBLOS de Jalisco y que la obra no alcanzará para dotar de agua a León, el gobernador de Guanajuato, Diego Sinhué se molestó y hasta organizó una rueda de prensa para decirle a los leoneses que «no están solos» y hasta amenazó a Jalisco con NO MANDARLE AGUA a Jalisco .

Sinhué también hizo un llamado a los actores de los diferentes partidos políticos a que se sumen a buscar soluciones de cómo le vamos a dar agua a los leoneses porque “de politiquería estamos hasta el copete”.

El delegado federal en Guanajuato, Mauricio Hernández compartió en sus redes un poco de historia del proyecto El Zapotillo en el que dijo que el proyecto fue trazado con el objetivo de garantizar con el cauce del Río Verde la dotación de agua para Guadalajara y la región de Los Altos y para León.

«Pero para garantizar el reparto de agua a León, técnicamente la única posibilidad consiste en inundar tres poblados. Sin consulta previa, sin tacto ni oficio político para ser consultados por ninguna autoridad en el proyecto, la población se manifestó en contra de la construcción de la presa, como era de esperarse», escribió.

Dijo que se tiene claro que hay una necesidad evidente de agua en Guanajuato, como también hay conciencia de los factores que han causado la carencia de líquido y la contaminación irracional de los ríos en el estado, «pero es justo por esta claridad, que no sería posible atender este problema pasando por encima de los derechos de terceros».

«No se ha cerrado ninguna llave, simplemente ésta nunca ha estado abierta», escribió.

Previous Post
Next Post

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *