Redacción
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SAN MIGUEL DE ALLENDE.- Esta noche, San Miguel de Allende ha perdido a una de sus más grandes defensoras de los animales: Maricruz Ayala Sánchez, quien dedicó su vida al rescate y cuidado de los perritos sin hogar.
Conocida por su inquebrantable amor y dedicación, Maricruz se entregó en cuerpo y alma para dar una vida mejor a aquellos seres que no tienen voz, pero sí sienten.
Durante años, Maricruz llevó a cabo innumerables ventas de garaje y gestionó su tienda especializada, destinando todas sus ganancias para ofrecer refugio y cuidado a los perritos en desgracia. Su pasión y compromiso la llevaron a fundar la Fundación Salvando Seres Vivos con Amor, una organización que hasta el último de sus días se mantuvo activa y comprometida con la causa que ella tanto amaba.
A través de su fundación, Maricruz no solo brindó un hogar y cuidados a los animales necesitados, sino que también creó una comunidad de apoyo y conciencia en torno al bienestar animal. Su refugio se convirtió en un santuario de esperanza para innumerables perritos, donde podían encontrar no solo un lugar seguro, sino también el amor y la atención que merecían.
Más de 200 perritos de la calle, rescatados de entre la violencia, por las calles, invadidos por enfermedades, encontraron un hogar y una familia a su lado.
Desafortunadamente, Maricruz también enfrentó una dura batalla contra el cáncer.
A pesar de los desafíos de su enfermedad, nunca dejó de luchar y seguir adelante con su misión de rescatar y cuidar a los animales. Su valentía y fortaleza fueron un faro de inspiración para todos los que la conocieron.
La noche del lunes 1 de julio del 2024, Maricruz Ayala ha partido, dejando un legado imborrable de amor, compasión y dedicación a los perritos sin hogar.
Su espíritu guerrero y su infinita bondad hacia los seres vivos que rescató seguirán vivos en los corazones de aquellos que tuvieron la fortuna de conocerla y trabajar a su lado.
Maricruz, ahora acompañarás en el cielo a aquellos seres que rescataste y que te esperaban con los brazos abiertos. Tu legado de amor y protección hacia los animales continuará inspirando a muchos.
¡Vuela alto Maricruz, y descansa en paz!
Tu vida fue un verdadero ejemplo de lo que significa amar sin límites! Gracias por todo.
