Redacción
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SAN MIGUEL DE ALLENDE.- Carmen Beckmann Macías, adoptó a San Miguel de Allende como su casa y se convirtió en una de las empresarias de la joyería más importantes de su país y de la región. Ella vivía al principio con su madre, que murió años antes de que ella de despidiera.
Por ella llegaban muchos clientes extranjeros al pueblo pintoresco y colonial de Guanajuato, para adquirir la fina joyería que ella ofrecía y creaba de la mano de manos sanmiguelenses.
Con la joyería logró obtener grandes ganacias que la llevaron a adquirir, al menos, 4 inmuebles en San Miguel de Allende, entre ellas 3 casonas que hoy son valoradas en millones de dólares y que al morir sin dejar testamento ni contar con familiares, quedaron en manos del acervo de la Universidad de Guanajuato.
¿Cuáles casas son? AHI TE VA:
- La casa de Hernández Macías 112
- Casa de la calle Hernández Macías 113
- Casona de la calle Hernández Macías 117
- Calle de Umarán Número 12
- LA CASA QUE PERDIÓ y se la entregó a Gloria Espinosa Briseño, quien hoy tiene una taquería en la calle Independencia de la colonia San Rafael. ubicación: esquina de Pila Seca y Hernández Macías.
- LA CASA DE UMARÁN NÚMERO 18
Esta es la única casa que conservó la Universidad de Guanajuato y que es la casa donde nació Ignacio Ramírez»El Nigromante» que hasta hace unos días se mantiene cerrada y justo ahora realizan obras para mejorarla.
Fue así que la Universidad de Guanajuato vendió todo porque consideraba que «NO LE ERAN ÚTILES» a la universidad y por eso las puso en venta.
Una de ellas, la del 117, también era propiedad de la Señora Beckmann, incluso de la esquina cuelgan aún los pendones de madera donde su apellido aparece, pero esa casa, con la presunta «movida legal» de Ignacio Reyes Retana, un abogado priista, la Universidad de Guanajuato «la perdió» sin chistar en un acto que se ha calificado de presunta corrupción y/o malos manejos legales.
Una nota publicada por el periódico Correo, revela que el abogado Ignacio Reyes Retana, un priista, exmagistrado y ex alcalde de Guanajuato capital , es señalado por integrantes del Frente Amplio Cívico SanMiguelense (FACS) como quien «contrató» a una mujer cocinera para que «se hiciera pasar» por quien cuidaba a la extranjera Carmen Beckmann para quedarse con sus propiedades en San Miguel de Allende.
Comparte a través de un documento, que el FACS advirtió a Miguel Márquez Márquez, gobernador de Guanajuato, que las casas intestadas de la señora Beckmann, tendrían que pasar a la Universidad de Guanajuato pues temían que fueran rematadas a particulares y porque San Miguel de Allende necesitaba un museo.
La sospecha de los integrantes del FACS no fue en vano y el difunto abogado Reyes Retana (quien falleció en febrero del 2021), fue a quien señalan como quien contrató a una mujer, que hoy tiene una taquería en la colonia San Rafael, para «hacerse pasar» como quien cuidaba a la extranjera y entonces hacerla «heredera».
El documento de «advertencia», los integrantes del grupo ciudadano la llevaron a la Presidencia de la Junta de GObierno de la LXII legislatura, la rectoría de Universidad de Guanajuato y a la Dirección de Asuntos Jurídicos de la UG, el cual todos sellaron de recibido.
La casona ubicada en la esquina de Pila Seca y Hernández Macías terminaron «perdiéndola», como lo advirtieron los integrantes de FACS, luego de que el fallecido abogadoterminó «contratando» a una mujer llamada Gloria Espinoza Briseño, quien hoy es cocinera y tiene una taquería en la calle de Independencia de la colonia San Rafael para supuestamente hacerse pasar por quien «cuidaba» a la señora Beckmann.
Sin embargo los integrantes de la organización ciudadana dijeron que NO SOLO NO LA CUIDABA, sino que ni siquiera la conocía.
Hoy todos los inmuebles están en manos de particulares, una de llas está ligada con un partido político.
Porque la casa de la esquina no solamente se la «quedaron a la brava» y la «perdió» la UG, sino que a quienes llegó, hoy tienen un cargo público que usaron junto con las autoridades para amendrentar a sus vecinos por el tema de una VENTANA.
Pero de eso, ya luego te platicamos, porque esta historia tiene mucha tela para cortar.
