Redacción
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GUATEMALA.- Gabriela Rico Zea, una emprendedora guatemalteca de 32 años de edad, ha generado conmoción en el mundo, no solo por ser una joven con muchos seguidores en sus redes sociales, donde compartía su vida ostentosa y su preocupación por el medio ambiente, sino por su detención y próxima extradición a Estados Unidos, por ser el principal contacto que «Los Chapitos» en Sinaloa, tenían para la compra y distribución del fentanilo.
La guatemalteca había creado una empresa de popotes y bolsitas hechos a base de maíz, la cual utilizaba como fachada para ir a diversas partes del mundo y conseguir, además de clientes para sus productos biodegradables para cuidar el ambiente, también sumaba contactos de grupos criminales… y entre los sitios que visitó y recorrió también incluyó a San Miguel de Allende.
Durante 10 años, Rico Zea fue el contacto principal entre su empresa ambiental y «Los Chapitos», el grupo del Cártel de Sinaloa liderada por los hijos de Joaquín «El Chapo» Guzmán, para la venta y distribución de fentanilo, uno de los precursores más peligrosos en el mundo.
A través de sus redes sociales, la empresaria presumía sus viajes a distintas partes del mundo, donde no solo promovía el cuidado ambiental, sino que también buscaba conexiones para la venta del precursor.
En un video de Iggi Technologies subido a su canal de YouTube en septiembre de 2018, Rico Zea, quien fue detenida en marzo de este 2023 y acusada formalmente por los EU el pasado 14 de abril, relataba cómo comenzó con la idea de «salvar al planeta» para darle a las generaciones futuras un lugar sostenible en donde habitar.
Sin embargo, para lograr sus objetivos, la empresaria guatemalteca buscó unos socios peculiares: «Los Chapitos».
Tras una serie de investigaciones, se determinó que la empresaria guatemalteca tenía contactos con “Los Chapitos”, grupo encabezado por los herederos de El Chapo: Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán Salazar, así como Joaquín Guzmán López -hermano de Ovidio Guzmán, narcotraficante detenido a principios de enero en Sinaloa-.
La marca I-ECO, creada por Rico Zea, producía bolsas y pajillas biodegradables hechas a base de fécula de maíz, y así iba por el mundo ofreciendo sus productos y haciendo conexiones.
Y en sus redes dejó la evidencia de que San Miguel de Allende, también formó parte de sus recorridos.
Esta semana, Gabriela Rico Zea espera ser extraditada, ella se declaró culpable de los cargos y tras ser detenida en marzo pasado, el viernes fue señalada por el Departamento de Justicia de los Estados Unidos.
Este caso es un recordatorio de cómo las actividades ilegales pueden estar ocultas detrás de iniciativas supuestamente altruistas o influencers que luchan por el medio ambiente, el cuidado del planeta o alguna otra causa para pasarse al lado oscuro de lo legal.
DATOS EXTRA:
- Estados Unidos ofrecía una recompensa de $1 millón dólares por información que diera con el paradero de esta guatemalteca, que según, ese país, aprovechó sus contactos comerciales con empresas Chinas, para comprar precursores químicos de fentanilo y apoyó para que estos fueran enviados a carteles de la droga en México sin ser detectados.
- El 17 de marzo de 2023, Rubio Zea fue arrestada en la ciudad de Guatemala.
- Rubio Zea permanece bajo custodia a la espera de su extradición a Estados Unidos.
