Redacción
Newssanmiguel@gmail.com
RECOMENDAMOS. – En la actualidad, el sector farmacéutico ha estado en la búsqueda de alternativas efectivas para reducir el uso excesivo de antibióticos y combatir la resistencia antimicrobiana, por ello, se han centrado en el fortalecimiento del sistema inmunológico como una estrategia preventiva y terapéutica.
El sistema inmunitario es la manera que tiene el cuerpo de protegerse de las infecciones respiratorias. Éstas son la causa más frecuente de ausentismo laboral y escolar, además de representar un detonante de exacerbación de padecimientos como el asma, por ello, algunas formas en las que se puede fortalecer el sistema inmunitario son:
- Estar físicamente activo
- Dormir lo suficiente
- Comer bien y mantener un peso saludable
- No fumar
- Uso de inmunoestimulantes
Algunos inmunoestimulantes son preparados a partir de los microorganismos implicados con mayor frecuencia en las infecciones respiratorias, demostrado que pueden estimular y modular al sistema inmunitario para inducir la respuesta de los anticuerpos. Según el estudio de Durmont[1], señala que el uso de inmunoestimulantes con lisado bacteriano mecánico sublingual disminuye la cantidad de episodios infecciosos en vías respiratorias.
“Los inmunoestimulantes son compuestos que activan y fortalecen las defensas naturales del cuerpo, aumentando la producción de células inmunitarias, mejorando la respuesta inmune a patógenos invasores y mejorando su capacidad para combatir infecciones virales y bacterianas” mencionó el Dr. Carlos Lenin Pliego, Médico Cirujano y especialista en Medicina Interna.
Además, los inmunoestimulantes no solo ayudan a prevenir enfermedades infecciosas, sino que también pueden promover un mejor estado de salud general. Esto puede incluir una mayor energía, mejor calidad del sueño y una menor incidencia de otros problemas de salud que podrían afectar la capacidad de un empleado para trabajar de manera consistente.
«Los inmunoestimulantes son herramientas poderosas que pueden fortalecer nuestro sistema inmunológico y reducir hasta tres episodios infecciosos al año para ayudarnos a prevenir enfermedades en vías respiratorias, disminuyendo hasta en un 50% el ausentismo laboral[2]. Sin embargo, es importante recordar que deben usarse con precaución y bajo la supervisión de un profesional de la salud, y siempre deben complementarse con hábitos de vida saludables» comentó el Dr. Carlos Lenin Pliego, Médico Cirujano y especialista en Medicina Interna.
El uso de inmunoestimulantes ofrece una perspectiva esperanzadora para reducir la dependencia del uso de antibióticos y preservar su eficacia a largo plazo. Además, representa una estrategia relevante tanto en la prevención de las infecciones respiratorias, así como para acortar los periodos de convalecencia una vez que hemos enfermado. Su uso ayuda a disminuir el riesgo de descompensación de otros padecimientos que pueden estar controlados como es el asma y el EPOC.
Es fundamental seleccionar inmunoestimulantes seguros y de alta calidad, así mismo resulta sumamente importante acudir al médico si algún miembro de la familia presenta algún síntoma característico de las infecciones en vías respiratorias recurrentes como la tos persistente, la dificultad para respirar, las sibilancias y la fatiga durante la actividad física y con ello, promover un mejor estado de salud general.