Redacción
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Con info de Ana Gaby Hernández
La fiesta de los Muertos está entre los vivos y en la Plaza Cívica de San Miguel, hay cráneos y pedazos de esqueleto que te puedes comer porque son de azúcar.
Una feria de Alfeñiques y la venta de disfraces y todo lo que necesites para celebrar a los muertos, lo puedes encontrar en este lugar en el que los marchantes pueden ayudar a los vivos para ese día especial para México.
Entre toda ellas está Patricia Luna, comerciante y elaboradora de alfeñiques desde hace 25 años.
Ella pertenece a la Asociación Tradicionalista del Padre Antonio Bustamante, un grupo de 39 personas que se dedican a la elaboración del alfeñique.
Con el paso de los años crea sus propias figuras de azúcar y limón, una lección que ha aprendido desde que era una niña.
«Al ver que ellos hacían éste dulce, me llamó mucho la atención, es muy rico el sabor de limón con el azúcar glass. Hay mucha creatividad, las calaveras, las tumbas, los pollos, borreguitos. Me llamó la atención ver su elaboración y ahora estoy yo aquí también haciendo el tradicional alfeñique».
Desde hace 6 meses comienza a trabajar para acompañar la fiesta del Día de Muertos, ya que dice sólo dedicar unas horas al día y por la variedad de figuras, inicia meses antes.
«Es algo laborioso, son muchos detallitos que se requieren trabajar con tiempo».
La creadora del tradicional alfeñique asegura que la Celebración del Día de Muertos y otras tradiciones que son parte de México son lo que hace rico al país y su gente «y esta tradición es tan dulce, que los enamora más».
Para ella el día de Muertos es más especial, porque es el momento que podemos heredar y compartir tradiciones donde «recordamos a nuestros seres queridos con llevar una ofrenda de lo que a ellos les gusta, un momento de pensar más en ellos. Los alfeñiques son variedad de figuras que se requieren en las ofrendas de lo que gustaba el familiar, la calavera es el elemento más importante porque es la muerte y el estar en paz».