Redacción
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GUANAJUATO.- Jorge Valencia Gallo, exdirector de Transporte del Estado de Guanajuato, ha sido condenado a 4 años y medio de prisión por aceptar sobornos, conocidos como ‘moches’, durante su gestión. La sentencia surge después de que se descubriera que en menos de un año Valencia Gallo había recibido alrededor de 2 millones 100 mil pesos a cambio de permitir que 8 taxis operaran de manera irregular en San Miguel de Allende.
Este caso se enmarca en el artículo 247 del Código Penal del Estado de Guanajuato, que define el cohecho como el acto de aceptar sobornos. Valencia Gallo asumió su cargo en abril de 2019 y se mantuvo en él hasta el 31 de marzo de 2020, periodo durante el cual llevó a cabo estas acciones.
Además de la pena de prisión, se le impuso una multa de 2 mil 534 pesos y se le inhabilitó para ocupar cargos públicos durante los próximos 10 años.
Estas medidas fueron establecidas por el Poder Judicial del Estado de Guanajuato, que también detalló otras sanciones, como la suspensión de sus derechos políticos y electorales, la negativa de beneficios y sustitutivos, así como la obligación de reparar el daño causado al estado, excluyendo el rubro de daño moral.
La vinculación a proceso por estos delitos tuvo lugar en julio de 2021, lo que significa que pasaron casi tres años para que se emitiera la sentencia contra Valencia Gallo.
Cabe destacar que todos los permisos irregulares fueron solicitados por Manuel Mendieta Tovar, representante de la Coalición de Operadores de Taxi, A.C., de San Miguel de Allende, quien entregó el dinero ilícito e incitó la corrupción, directamente a Valencia Gallo, asegurando que la suma total ascendió a 2 millones 200 mil pesos.
La mayoría de los pagos se realizaron a través de Jonathan Montoya Zamora, amigo de Valencia Gallo y ex empleado de un bar de su propiedad.
