Redacción
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SAN MIGUEL DE ALLENDE. – Enrique y Caterine dividen su vida entre Estados Unidos y México, el país que decidieron adoptar para vivir.
Es en Dolores Hidalgo donde tienen su casa y frecuentemente vienen a San Miguel de Allente donde comen, conviven con sus amigos, pasean y les gusta visitar. Así han pasado más de 10 años de su vida.
Sin embargo, el pasado 15 de abril, les ocurrió uno de los hechos que más los ha enojado, entristecido y molestado, cuando un joven elemento de Policía Municipal, les quitó $10 mil pesos con el pretexto de cuando pasaron junto a él en su auto, «sintió que olió a mariguana».
Así es, Cate y Enrique relataron que al parecer el elemento de policía, que dice andaba en motocicleta y ciruclaba cerca de la 1:00 de la tarde sobre la calle de Hidalgo, los extorsionó con la amenaza de «llevárselos a los separos» donde el «chistecito» les saldría hasta en $20 mil pesos y 3 días de cárcel, más aparte otros $10 mil para sacar el auto del corralón.
Cate y Enrique no quisieron dejar el hecho sólo en un anécdota más y por eso la contaron:
«Dejé a Caterine en la calle Hidalgo porque iba a hacer compras y para no entrar yo a un estacionamiento público, le dije yo que iba a dar varias vueltas a la manzana hasta volverla a encontrar en la esquina donde la dejé.
«Cuando iba yo a dar la vuelta, más o menos en donde está la biblioteca pública y la calle Insurgentes, iba yo como a mitad de la cuadra cuando 2 policías en motocicleta me alcanzaron y me empezaron a pitar que me parara.
«Me detuve, bajé mi ventana y me dijeron ‘usted viene fumando mariguana’, les digo ¿mariguana?, yo no traigo mariguana, si la calle huele a mariguana no es mi culpla «, narró Enrique.
«Les dije, una persona que fuma mariguana su carro huele a mariguana, es muy característico, mi carro ni siquiera huele tantito más que a aroma natural de carro y me dijeron:
«Ahorita te vamos a llevar a la cárcel por venir fumando mariguana, cuando yo ni siquiera tenía mariguana, les dije que podían revisar y me dicen dame la mano izquierda y les doy mi mano, uno de los policia la olió y concluyó diciendo: tu mano huele a mariguana«.
‘Ya las cosas se pusieron más fuertes y el policía me dijo que se llevaría mi auto porque la mano me olía a mariguana y dijo: ‘nos vamos a llevar tu carro y tú te vas a ir a la cárcel, enséñame tu licencia, entonces saqué mi cartera, siempre traigo un billete de 100 dólares por emergencia, me lo vieron y dice:
«Eso no te va a alcanzar para la multa y como tu carro se lo van a llevar al corralón, eso te va a costar otros $10 mil pesos para sacarlo. Luego te vas a ir a la cárcel por dos o tres días, y le digo ¿Cómo es posible si no estoy haciendo nada? Y me dijo, ‘pues nada más te estoy diciendo qué eso es lo que vamos a hacer’, se dio la vuelta y platicó con su compañero.
Enrique se asustó, se imaginó en la «cárcel» acusado del delito de «TU MANO HUELE A MARIGUANA», según relata es lo que le dijo el policía sanmiguelense y como de México se han dicho tantas cosas respecto a los policías y los que hacen las leyes, no quiso meterse en problemas…. y tampoco se equivocó.
«¿Entonces cuánto dinero quieren más?«, fue la pregunta que le hizo Enrique a los policías. «Mi esposa está en el centro haciendo compras y ahorita la voy a volver a encontrar, me dicen, ‘¿Tú esposa trae dinero?’, les digo que posiblemente, porque acabábamos de ir al banco».
«Después de eso se fueron atrás de mí en las motos, me siguieron hasta la calle Hidalgo, ya me bajé yo y le dije a mi esposa tengo un problema con estos policías, quieren dinero de mí, si no me van a llevar a la cárcel, y mi esposa dice ¿por qué? ¿qué hiciste? ¿Cuánto quieren?, le digo no sé pero me quieren llevar.
«Mi esposa contó 8 mil pesos que habíamos sacado del banco ahí enfrente de los policías y más mis 100 dólares y entonces los agarraron y me regresaron mi licencia y se fueron y nos dejaron ahí, sin nuestro dinero, en shock y ya después muy enojados.
«Si los vuelvo a ver por supuesto que los identifico, uno de ellos era muy joven entre 20 y 30 años, es el que más nos molestó, el que se encargó de hacer el NEGOCIO del día, gracias al uniforme de policía que le dieron «, detalló Enrique.
San Miguel de Allende es el lugar favorito de Enrique y de su esposa Caterine para vacacionar.
Estarán solamente una semana para luego volver a California, su estado natal.
Hoy esperan que las autoridades municipales tomen en cuenta la clase de servidores que hicieron, los que tienen en la calle, los que les entregaron un arma y un uniforme para «defender a la gente» pero «¿y de ellos quién nos defiende?», pregunta.
«Nosotros regresamos cada año y San Miguel de Allende es nuestro lugar favorito porque fue donde nos conocimos hace más de 35 años, y ese es el motivo. Esa es la historia que nos pasó es verdad todo lo que estoy diciendo», dijo Enrique.
«No había razón y motivo alguno para que me detuvieran. No pueden detener a una persona porque huela a una hierba prohibid. NO TUVIERON RAZÓN NI MOTIVO, LO QUE HICIERON FUE CHANTAJERARME«.
Enrique y Caterine hacen un llamado a las autoridades municipales de San Miguel, dicen que tengan más cuidado cuando contratan a la gente, necesitan revisar que no tengan antecedentes penales y que tengan educación.
«Estos señores de seguro hacen esto seguido porque me lo hicieron a mí. San Miguel vive del turismo y nosotros no queremos que otros turistas pasen por lo que hoy nos pasó a nosotros, que tengan cuidado con esas personas», concluyó Enrique, declaró.
