Redacción
Newssanmiguel@gmail.com
SAN MIGUEL DE ALLENDE. – Hoy es Jueves del Cuerpo y la Sangre de Cristo, en iglesias de San Miguel de Allende lo están celebrando con misas a puerta cerrada, como ha sido anteriormente en otras celebraciones importantes para la religión católica, en este tiempo de cuarentena por la pandemia del Covid-19.
Por ejemplo, en el templo del Oratorio hay sagrada eucaristía casi cada hora, desde la primera que se celebró a las 7 de la mañana por el R. P. Juan Francisco Campos Tovar, quien dio una pequeña lectuta de la Biblia, para después explicar un poco de la importancia de la Fiesta del Corpus Christi.
«Hoy celebramos la solemnidad del cuerpo y la Sangre de Cristo, el Corpus Christi, que para nosotros como iglesia se México como católicos, es una de nuestras cuatro llamadas ‘Fiestas de Precepto’, en esta celebramos el cuerpo y la sangre de Cristo. Esto nos recuerda cosas muy importantes, porque la eucaristía es el sacramento de sacramentos, es donde emana también lo que es nuestra vida espiritual, porque Cristo en persona se hace presente en la eucaristía, y porque él también se nos da como alimento en su cuerpo y en su sangre», dijo el padre Juan Francisco.
«La solemnidad del Corpus Christi es una fiesta que si bien se celebra a nivel universal, para nosotros tiene ese carácter de fiesta de precepto, ahora por estas circunstancias de la pandemia, tenemos que vivirlo también ciertamente de una manera diferente, en muchos de los casos vivirlo desde nuestros hogares, desde esa iglesia doméstica que es el hogar en donde presiden como ministros los padres de familia, los cónyuge, los esposos, pero lo celebramos desde este y desde nuestros recintos sagrados», agregó.
El Corpus Christi es una fiesta que a lo largo de muchos años se ha venido ya celebrando, instituida por el papa Urbano IV a finales del siglo XIII, en donde por circunstancias de manifestación de Fe se podría decir, se da un milagro carístico, en donde un sacerdote que vivía en Italia había dudado de la presencia real de Jesucristo en la Ostia y en el Vino consagrados, en un momento que estaba celebrado la eucaristía, derramó vino que fue manifiesto en sangre y así se da ese milagro carístico en donde se hacen algunos estudios por diferentes ciencias, y se llega a comprobar que se trata de sangre auténtica.
«Y hasta la fecha se conserva ese purificador, esa ropa sagrada en la que fue derramada la sangre de Cristo y está de manifiesto, relató el padre del Oratorio durante la misa, que fue transmitida por Internet.
