Redacción
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Stant es el nombre de la nueva industria que está en Guanajuato y que hoy se inaugura de manera formal. Es la primera que llega al Polígono Empresarial de San Miguel de Allende.
Nereo Rodríguez es el director ejecutivo de Stant y el encargado de aterrizar el proyecto en la ciudad.
Reconoce que llegar a San Miguel fue un acierto, porque además de estar conectado a las carreteras principales, está fuera de lo que llama “patios traseros” de las grandes armadoras, evitando con esto competencia de mano de obra y tráficos que pueden retrasar entregas.
“Fue un largo proceso de revisión, evaluación y selección y finalmente quedaron algunos estados participantes para instalarnos: San Luis Potosí, Querétaro, Zacatecas y otros más, por lo que comenzamos a estudiar toda la infraestructura y recursos, tanto humanos como de abastecimiento y logística y nos dio como resultado, Guanajuato”.
Resaltó que su primera intención fue quedar lejos del corredor industrial Querétaro-León debido a que sus colegas le han comentado que hay ya cierto grado de saturación por empresas y una rotación de personal que los obliga a capacitar e incrementar sueldos ante la competitividad de las empresas, por lo que su idea principal fue buscar otro lugar.
“Fue casi por coincidencia que nos enteramos de la creación del parque de San Miguel. Está retirado pero cerca de los clientes y tenemos la fortuna de ser proveedores de casi toda la industria automotriz como Ford, Chrysler, Volvo, Honda, Land Rover y más, lo que nos da flexibilidad de que no necesitamos colocarnos en el patio trasero de alguien para trabajar”.
Stant tiene 8 plantas distribuidas en Estados Unidos, República Checa, Corea, China y ahora dos en México, la principal está en Tijuana. En la planta se producen componentes para sistemas de control de emisiones y para sistemas de control de temperaturas.
“Tenemos válvulas, fibras de carbón activado, sistemas de inyección y somos diseñadores, lo que nos da gran competitividad. Nuestros procesos están a la cabeza en el cuidado del medio ambiente, por eso San Miguel de Allende no dudó en recibirnos en este parque que es 100 por ciento amable con la ecología, pues nuestros procesos son muy limpios, no hay desperdicio, ni se manejan aceites o solventes”.
La planta en la que se realizó una inversión de casi 60 millones de dólares se encuentra en su primera fase y 200 empleados ya comenzaron a trabajar. Su meta será la generación de 500 empleos directos.
“Toda la mano de obra como operadores, empleados y producción son 100 por ciento sanmiguelense. Tenemos un banco de empleos de cerca de 100 personas que forman parte de la lista de espera y otros 100 se están capacitando”.
Por parte del Gobierno del Estado, Stant se apoya en la capacitación de quienes serán sus empleados a través del Instituto Estatal de Capacitación (IECA), que se refuerza con la visita continua de especialistas del mundo que vienen a San Miguel a entrenar a la gente.
“Nuestra idea es formar nuestra fuerza laboral, no requerimos gente capacitada, sino que les damos la oportunidad de aprender a través de nuestros procesos y soporte”.
La mayoría de sus producciones serán para Estados Unidos, sin embargo las armadoras instaladas en Guanajuato serán también sus clientes, que aunque no están cerca de ellas, la conectividad carretera les ayudará a llegar a sus destinos.
