Redacción
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SAN MIGUEL DE ALLENDE.- Esta mañana la mamá de Rosy, la levantó muy temprano para desayunar, bañarse y después ponerse el uniforme de la escuela a la que le encanta ir. Hoy empezó su 2o. año de kinder.
Sólo que esta vez lo haría igual que como terminó su curso escolar anterior, a distancia y desde la pantalla de un televisor.
Su mamá, que tiene la fortuna de poder trabajar desde casa, mientras supervisa las clases de Rosy, ella hace «sus cosas» mientras observa la carita feliz de su pequeña saludando a sus compañeros de clase que hace más de dos meses no veía.
«Le cambió su carita al verlos, convivir con ellos es para ella un momento feliz. Me ha dicho que promete no quitarse el tapabocas, lavarse muchas veces las manos, tomar distancia, pero que la lleve ya a la escuela porque quiere ver a sus amiguitos. Pensamos que es dificil que comprendan lo que en el mundo está pasando, pero ellos nacieron tecnológicos y entendiendo muy bien el momento que estamos viviendo», dice Paola, su mamá.«, dice su mamá Patricia.
Hoy Rosy empezó el día con su Miss Lily quien le da Español para luego activarse, levantarse de su silla y ponerse a mover el cuerpo en la clase de educación Física con el profesor Víctor y luego del recreo seguir con su clase de arte y luego la de inglés con la maestra Ame.
Su mamá cuenta que hace poco fue su cumpleaños, uno muy diferente que pasó sólo su familia, un pastel y regalos.
«Quería un brincolín, piñata y muchos amigos, pero le dije que recordara que el Coronvirus todavía no se iba del todo de San Miguel de Allende. Cuando llegó la hora del pastel, su deseo fue: que se acabe el Coronavirus porque quiere ir al zoológico y a la playa».
Rosy es sólo una de los más de 1 millón 300 mil alumnos de preescolar, primaria y secundaria que hoy volvieron a clase, a una escuela muy peculiar que estamos seguros que NO LO OLVIDARÁN.
