Redacción
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SAN MIGUEL DE ALLENDE. – Dentro de este regreso a semáforo naranja en San Miguel, los marchantes en los mercados dicen que los hicieron que guardaran todos los bancos, entonces sólo hay comida para llevar. Pero la incongruencia es que a todo mundo dejan tener sillas y mesas, unas largas filas de gente y a ellos los friegan.
Están enojados porque en los restaurantes si están montones de personas, aunque sea en los de los portales o en las entradas, para ellos no hay restricciones y en cambio a las fonditas si les va mal si no acatan las reglas.
En las afueras de los restaurantes y Bares, las personas se aglomeran, no respetan la sana distancia.
En los portales
Restaurante Margarita en la calle de San Francisco.
Afuera de CUMPANIO en la calle Correo.
Mientras que las fonditas en los mercados están vacías, la gente no les consume por no haber asientos para comer, solo tienen comida para llevar y señaléticas en el suelo para que las pocas personas que llegan, tomen su distancia.
Así lucen el Mercado Ignacio Ramírez y Mercado de San Juan de Dios.
La cosa está dispareja y los de los mercados están bastante molestos.
«En el área de comida nos quitaron los bancos que teníamos y pues ya no se pude vender comida para ahí, sino solo para llevar, sé que estamos en una situación por la pandemia pero no no nos avisaron con tiempo y el día martes nos comunicaron que si se podía con el 50%, y pues todos estamos respetando. Ahora, ¿Por qué en restaurantes si hay permiso?, además de que los tranvías con gente y llenos», manifestó un vendedor de comida en el Mercado Ignacio Ramírez.
«De ahí dependemos muchas familias, no se nos hace justo que ellos si y nosotros no, o todos coludos o todos rabones», agregó el vendedor.