Redacción
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GUANAJUATO. – Para morir dignamente, en Guanajuato 985 personas han solicitado la Ley de Voluntad Anticipada desde su entrada en vigor en el año 2012.
Recientemente, el periódico estatal el Correo, dio a conocer datos importantes sobre esta ley, que consiste en la solicitud de un documento ante un notario público, de morir dignamente con cuidados paliativos, como una medida preventiva ante el supuesto de una enfermedad terminal.
En el artículo con fecha de publicación 18 de mayo de 2022, se informa que Guanajuato es uno de los 14 Estados de la república con mayor demanda, con aproximadamente 971 peticiones, de las cuales 506 corresponden a San Miguel de Allende, convirtiéndose en el municipio con más solicitudes y que en su mayoría son de extranjeros.
Le sigue Celaya con 240 casos, en tercer lugar Guanajuato Capital con 108, en el cuarto sitio León con 73 solicitudes de esta ley. Y entre otros como Irapuato, San Luis Potosí, Comonfort, Dolores Hidalgo, San José Iturbide, Jaral del Progreso, Yuriria San Francisco del Rincón, Coroneo y Salamanca, acumulan 44 peticiones.
A dos días de la publicación de dicho artículo, las peticiones han aumentado a 985, en los dos últimos días se gestionaron 14 nuevas solicitudes, informó el licenciado Mariano Flores Maldonado, director de Convenios y Normatividad, en la cual está inscrita la Ley de Voluntad Anticipada y en la que funge también como titular de la Unidad ubicada en la capital del Estado (Guanajuato).
«En realidad, la Ley de Voluntad Anticipada su finalidad, es la prevención o negarse a procedimientos quirúrgicos innecesarios, que de manera innecesaria traten de prolongar su vida cuando la persona o el paciente, se encuentren en una enfermedad terminal, ya sea patológica, incurable, irreversible y que no tenga cura conocida ¿Verdad?, en esto podemos tener una diabetes, un cáncer, una insuficiencia renal crónica, donde ya son enfermedades que son terminales y éstas, realmente no es que tengan cura conocida, osea, no hay cura conocida, no hay un remedio pero ya se suministran de manera innecesaria los procedimientos médicos quirúrgicos que para nada le sirven al paciente, en ese sentido se rehúsa uno a recibir esos procedimientos innecesarios y se solicitan los cuidados paliativos, que son los cuidados mínimos ordinarios, para el cuidado de esta persona que sería morir con dignidad, que se mantenga sin dolor, que se mantenga limpio el paciente y que no sufra, que se le dé el mayor trato», detalló el licenciado.
Los permisos se dan de dos formas, uno de manera preventiva, el que pueden solicitar todas las personas ante un notario público cuando se encuentran sanas, le manifiestan su voluntad anticipada, él levanta un testimonio notarial de que es su voluntad morir bajo cuidados paliativos, ante el supuesto de una enfermedad terminal, patológica, irreversible.
El otro supuesto, se da en las unidades médicas cuando en éstas se tiene un diagnóstico clínico inferior a 6 meses de vida, el médico le da la información al paciente y él decide si tomar o no la voluntad anticipada, o cuando el paciente en su diagnóstico clínico terminal ya no tiene conciencia para decidir, lo decide uno de sus familiares, al igual que en el caso de niños muy pequeños.
Desde la entrada en vigor de esta Ley de Voluntad Anticipada en Guanajuato, en el 2012 a la fecha, un total de 986 personas han manifestado morir dignamente con cuidados paliativos, ante el supuesto de una enfermedad terminal, 985 son vía notario (en manera preventiva) y solamente 1 ha sido ante la unidad médica. «Van desde los 22 hasta los 90 años, en su mayoría adultos mayores, quienes solicitan el documento», indicó Mariano Flores.
En el Estado de Guanajuato hay 70 notarios que pueden realizar este procedimiento, que tiene un costo que va desde los $1400 hasta $2,500 pesos.
