Redacción
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Dos semanas después de que se dictara sentencia contra Toño Luna, la casa donde ocurrió todo, la misma donde quedaron los cuerpos de los niños Mateo, Adrián y Gabriel, ayer se quedó sin vigilancia.
En las puertas y portones aún hay sellos de la procuraduría de Justicia de Guanajuato con el mismo número de averiguación de la que se sigue en el caso de Toño, unos que no existían hasta hace dos semanas, así como cintas amarillas que delimitan el paso y que también fueron colocadas hace unos días.
Fuentes consultadas por NEWS aseguraron que desde ayer se dio la orden a los patrulleros de abandonar la vigilancia del lugar porque ya había sido liberada como prueba de los hechos ocurridos aquella madrugada del 14 de enero del 2016, cuando en el operativo policiaco donde no detuvieron a ningún integrante de grupos delictivos que pelear a balazos por más de 2 horas porque todos «se salieron por la parte de atrás» como dijo el procurador Carlos Zamarripa.
Esa noche sólo detuvieron a un papá que «muerto de miedo» disparó contra sus hijos (como lo dijo su abogado defensor) para evitar que los secuestraran y torturaran quienes disparaban contra ellos.
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AQUÍ LA NOTA DEL DÍA DE SU SENTENCIA (DALE CLICK): TOÑO SE DECLARA CULPABLE Y LE DAN 16 AÑOS Y 8 MESES DE PRISIÓN
La finca está ubicada en la Salida Dolores Hidalgo y por más de 6 meses permaneció asegurada por la PGJE
