Redacción
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SAN MIGUEL DE ALLENDE. – Sammy es un chileno varado en México, que por el tema de la pandemia del Covid-19 su país le cerró las puertas por temor al virus.
Desde el 21 de abril está viviendo en San Miguel de Allende, encontró un departamento desde el cual trabajaba vía remota como tarotista y escribe un libro.
Su permiso de estancia en el país es de 6 meses.
«Aquí me han tratado como nunca hubiera imaginado. ¡Qué país tan increíble! Mi familia se sorprende de verme en fotos tan alegre, y saliendo a las calles. Sé que debo regresar a Chile en noviembre, pero sin duda volveré después a México: este lugar ha sido el regalo que me tenía reservado el Covid», indicó el extranjero.
Sammy cuenta que la pandemia lo dejó varado en Miami, donde su preocupación era el dinero, pagaba 70 dólares diarios en el único hotel que lo recibió, ya que los demás tenían miedo de que estuviera infectado.
Le quedaban 1,200 dólares y su vuelo de regreso a Chile había sido congelado hasta noviembre, el cual sólo podrá abordar desde Nueva York.
Las esperanzas de regresar a su natal Chile eran pocas, pues estaba totalmente cerrado. Por lo que optó por llamarle a una amiga en México que conoció un año antes, quien le dijo que las fronteras estaban abiertas y que se apurara porque estaban apunto de cerrar.
Con 400 dólares, Sammy fue al mostrador de Aeroméxico, el único vuelo disponible salía en media hora y debía pagarlo con tarjeta.
«La aerolínea me sacó una tarjeta y me monté al avión, éramos solo 4 personas», dijo.
Para cuando llegó a México, después de pasar varios filtros con gel y de toma de temperatura, Sammy ya solo contaba con 200 dólares, con los que tomó un camión de camino a San Miguel de Allende y después de 4 horas llegó a la ciudad patrimonio con 100 dólares en la cartera, con los que bastaría para instalarse y empezar a trabajar de inmediato.
Con información de Forbes.
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