Redacción
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La CONAGUA entregó a Pablo Rodríguez un oficio para trabajar en la remoción de un muro que fue colocado en la presa y que que modificó su estructura original y no para cambiar la estructura original de la pared de la Presa del Obraje.
A la pared de la presa del Obraje la dejaron «chimuela».
Así lo indicó Margarito de la Cruz Gallegos, subdirector Técnico de la Dirección de Conagua, cuando se le preguntó sobre los trabajos que se realizan en una parte de la corona de la presa del Obraje que desde hace unas semanas fue denunciada a través de redes sociales, generando con ello la modificación de su estructura original.
Lo anterior en relación a las obras que se realizan en la presa donde uno de los vertederos ha sido modificado en su estructura original, dañando con ello la forma que tiene el lugar desde el año 1730, año en que terminó de ser construida por los pobladores.
Los vecinos señalan que en esos terrenos, pertenecientes al empresario Pablo Rodríguez, se pretende construir un desarrollo al lado de la presa, de quien han denunciado que ocupa parte de la vía pública para colocar material de construcción sin que las autoridades municipales lo multen o sancionen. Señalaron también que en la zona, la construcción de unas escaleras están detenidas porque él no ha permitida que se continúen los trabajos y los funcionarios municipales están a lo que él diga..
Hace unas semanas, los vecinos denunciaron a través de las redes sociales que por las noches y en el día, hombres que identificaron como trabajadores de Pablo Rodríguez, golpearon una de las paredes de los vertederos hasta modificar su estructura original y dejarla «chimuela».
El funcionario de Conagua aceptó que se entregaron oficios al señor Rodríguez pero donde se le pedía que «regresara a su estructura original» la zona de vertederos de la presa en la que se realizaron obras que obstruían el paso natural de la presa y modificó su estructura original.
Indicó que eso forma parte de las medidas preventivas que se toman desde la Conagua y de representantes de autoridades de Protección Civil para salvaguardar las zonas de riesgo y proteger a la ciudadanía.
Por las lluvias de las últimas semanas, la presa se encuentra a un 70 por ciento de su capacidad; los vecinos dijeron que el domingo 1 de julio, el nivel del agua arrojó grandes cantidades de agua que provocaron que superara su nivel y que horas más tarde se desfogasen problemas.