Redacción
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GUANAJUATO. – En la última semana en el Estado de Guanajuato se han registrado varios hechos violentos en los municipios, de los cuales el saldo ha sido la muerte de 8 personas. Inició con la detención y tortura a un periodista en Celaya, luego la muerte de una mamá conductora de UBER en León, después el asesinato de una buscadora «también» en Celaya, el asesinato de 4 mujeres en Apaseo el Grande y dos homicidios más en San Miguel de Allende, uno de ellos la víctima era un bebé de 11 meses.
Un periodista violentado por policías en Celaya
La noche del 28 de abril, el periodista Ángel Galindo, colaborador del medio estatal El Sol del Bajío, fue golpeado por la policía municipal de Celaya.
Angel había ido a cubrir una nota policiaca junto con un compañero que lo llevó en su vehículo, cuando de regreso alrededor de las 6:00 pm, se estacionó a la altura del Parque Lineal en Trojes, cuando tres elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de Celaya se acercaron y lo interrogaron. Él se identificó como periodista y los elementos comenzaron a agredirlo físicamente y verbalmente, terminando por someterlo y subirlo a la batea de una patrulla y se lo llevaron a la comandancia norte, donde por dos horas lo estuvieron golpeando y lo amenazaron de muerte si decía algo. El periodista puso su denuncia en la Fiscalía y ante la Procuraduría de los Derechos Humanos de Guanajuato.
Localizan sin vida a conductora de Uber en León
El sábado 29 de abril, Luz Adriana, una conductora de UBER en León, madre de dos niñas a las que mantenía con su trabajo, fue reportada como «desaparecida» por sus familiares, dijeron que se le vio por última vez en el fraccionamiento Jardines del Río, de donde salió a un servicio a la comunidad Hacienda de Arriba. Al día siguiente, domingo 30 de abril, Adriana fue localizada sin vida en un camino de terracería cercano a la carretera Hacienda Arriba-Comanja de Corona, su cuerpo tirado entre la maleza y con signos de violencia. Un año antes, Luz Adriana había perdido a su esposo, por lo que ahora sus dos hijas menores de edad, se han quedado huerfanitas.
El asesinato de una madre buscadora de Celaya
El martes 2 de mayo, en Celaya fue asesinada una madre buscadora identificada como Teresa Magueyal, quien pertenecía al colectivo Una Promesa Por Cumplir y buscaba a su hijo José Luis Apaseo Magueyal, quien desapareció el 6 de abril del 2020 en la comunidad de San Miguel Octopan, misma localidad donde fue asesinada la madre.
Era el medio día cuando Teresa circulaba en una bicicleta y fue interceptada por hombres armados a bordo de una motocicleta, quienes le dispararon a quemarropa dejándola sin vida, para luego huir con rumbo desconocido. Ante la pérdida de su compañera, el colectivo se pronunció y pidió a las autoridades buscar a los responsables para que se haga justicia.
Asesinan a cuatro mujeres en Apaseo el Grande
La mañana del domingo 30 de abril, en Apaseo el Grande fueron asesinadas al interior de su casa, dos mujeres y dos niñas.
Eran las 6 de la mañana cuando en la calle Ignacio Allende, en pleno centro de la ciudad, los vecinos comenzaron a escuchar golpes «sin saber de lo que se trataba», hasta que se levantaron y vieron acordonado el domicilio donde se cometió un multihomicidio. Eran una niña de 7 años, una de 11, su mamá de 30 años y su abuelita de 60 años».
Un bebé y un hombre asesinados en San Miguel de Allende
Eran aproximadamente las 5:00 de la tarde del miércoles 3 de mayo, cuando en la Colonia San Antonio un hombre identificado como Mauricio, fue atacado a balazos por hombres armados en la calle Santa Lucía, provocándole heridas que terminaron por quitarle la vida. Una vez acordonada la zona por elementos de la policía, llegaron agentes de la Fiscalía y levantaron los indicios para las investigaciones de ley correspondientes.
Y más tarde, cerca de la media noche, un hombre y su bebé fueron atacados a balazos. El masculino que aparentaba unos 25 años de edad, se encontraba cenando en una taquería ubicada entre el fraccionamiento Mezquites y la colonia San Antonio, con su hijo de 11 meses en brazos, cuando una camioneta se acercó a ellos y hombres armados se bajaron y empezaron a disparles, para luego huir del lugar.
Tras el ataque, el hombre herido se subió a su vehículo junto con su bebé y se dirigió a la Cruz Roja para recibir atención médica. Lamentablemente el niño no sobrevivió, llegó sin signos vitales, había recibido un disparo en el cráneo, mientras que el papá fue lesionado en el tórax y en un brazo y fue trasladado al hospital civil de la ciudad.
