Redacción
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Dos muertes y al menos 5 lesionados fue el saldo de tres aparatosos accidentes vehiculares ocurridos el día de ayer en carreteras y vialidades de San Miguel y donde al parecer la imprudencia al conducir y el exceso de velocidad generaron también miles de pérdidas materiales y problemas de circulación.
El primero de los accidentes ocurrió cerca de las 11:00 de la mañana en el Libramiento Manuel Zavala, donde el conductor de una camioneta al parecer se atravesó al paso de un camión generando que la unidad pick up diera varias volteretas hasta quedar en el sentido contrario. Un hombre era el conductor y ahora esta en el hospital porque quedó prensado en la cabina. Está grave.
El segundo de los accidentes ocurrió en la carretera a Dolores Hidalgo, frente a la entrada del rancho Santa Margarita y San Benito, donde se realizan cursos de verano para niños. Ahí los papás esperaban en sus autos la salida de los niños y de pronto la conductora de un auto Tsuru atravesó de lado a lado la vía sin fijarse que del otro venía una camioneta roja, la cual la embistió e impactó contra otros 4 autos que estaban en el lugar.
La mujer del Tsuru, que al parecer era sanmiguelense e iba por un menor a ese campamento, murió en el lugar, prensada en su auto; los tripulantes de los otros autos fueron también atendidos por los paramédicos que llegaron al lugar para atender el suceso.
Tres horas más tarde (7:00 de la noche) otro accidente se suscitó frente a la entrada de unos viñedos en la carretera a Celaya con dirección a San Miguel de Allende, donde una mujer que se dice trabajaba en Celaya y que según los peritajes circulaba a exceso de velocidad, perdió el control de la unidad y se estampó contra una barra de contención donde el auto comenzó a despedazarse y quedó partido a la mitad. La chica de aproximadamente 30 años murió en el lugar y lo que quedó de su auto quedó sobre la barra de contención.
Dos mujeres perdieron la vida y un hombre resultó con lesiones severas al participar en diversos accidentes viales. Los peritajes indican que fue la imprudencia al conducir lo que puso su vida en juego y dos de ellas descansan ahora en paz.
