Redacción
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SAN MIGUEL DE ALLENDE. – Hasta hace pocos días se desconocía la visita del Señor de la Columna a San Miguel de Allende, ante las medidas de prevención contra el coronavirus, que se habían emitido en el municipio por las autoridades eclesiásticas y las autoridades de salud, se llegó a pensar que su traslado desde el Santuario de Jesús Nazareno en Atotonilco, esperaría por lo menos hasta que terminara la contingencia, lo cual no fue así.
Tomó por sorpresa a los feligreses sanmiguelenses, que el Señor se adelantó, llegó este martes 24 de marzo al templo de San Juan de Dios. Los encargados de la Hermandad, José Luís Malagón y Josue Patlan, fueron por la imagen sin hacer del conocimiento de nadie, solo convocaron a los medios para anunciar su llegada, que ya está en San Miguel de Allende la imagen del Señor de la Columna.
El Pbro. Jesús Palacios, vocero de la Diócesis de Celaya, Guanajuato, a la que pertenece San Miguel de Allende, habló con News respecto al tema, dice que solo de esta manera, osea, sin avisarle a la gente, era posible el traslado de la imagen del Señor a San Miguel.
«No se rompe la tradición, porque bueno, la tradición es de que venga de allá de la parroquia de Atotonilco, que esté acá en el templo de San Juan de Dios, que acá pase las fiestas o celebraciones litúrgicas de Semana Santa, y punto».
«¿Qué es lo que se irrumpe?, pues alomejor el hecho de que la gente vaya, la multitudinaria peregrinación que se acostumbra acompañar la imagen, de la parroquia de donde está ordinariamente a San Miguel y luego de San Miguel de regreso a la parroquia donde está», dice el padre Jesús.
«Como bien, en tiempo habrá todo esto en las disposiciones, ahora si que, ya no nuestras, si no en las disposiciones de salud, y yo creo que hay que si tener mucha FE, pero también tener muchas precauciones ¿No?, entonces yo creo que hoy tenemos que decir sencillamente, que nos aislamos hoy, para que el día que nos volvamos a juntar, no nos falte nadie».
«Que resulta que de alguna manera nos emocionamos y seguimos y hacemos y provocamos, es una devoción que no es esencial en el caminar litúrgico de la gente de la iglesia, si no es una tradición que sí, que tiene muchos años, que de mucho respeto y de mucho todo, pero hay que entender que la vida, que la salud, está por encima de eso», explicó.
Indica que la llegada del Señor de la Columna a San Miguel de Allende, fue una procesión privada en silencio, para evitar aglomeración y evitar amenaza y riesgos de contagio.
¿Qué se hizo?
Tomar la imagen, dos, tres personas para poder maniobrar y después llevarla a donde se debe de estar, de allí se dio a puerta cerrada una rueda de prensa con el padre Manríquez y el padre Dante, lo que se hizo no estaba prohibido por la Diócesis, su traslado se hizo en horarios en los cuales para la gente es difícil y que también no se dio a conocer, precisamente para evitar la aglomeración.
Indica que el obispado ha manejado 10 personas (por mucho) en las misas a puerta cerrada, porque a él le ha tocado atender a personas que buscan la posibilidad de celebrar su fiesta un poco masiva, y les dice «Yo en nombre del Señor Obispo te digo perfectísimo, está bien, puedes celebrarla, pero me traes una autorización de la Secretaría de Salud, dirigida al obispado, a la Diócesis de Celaya y al estado de Guanajuato», detalló el vocero de la Diócesis de Celaya Guanajuato, el padre Jesús Palacios.
Pues ya llegó el Señor de la Columna a San Miguel de Allende, su imagen está resguardada en el templo de San Juan de Dios, las misas en su honor serán a las 8:00 am, 12:00 pm y 6:00 pm, a puerta cerrada y vía Internet, se van a estar transmitiendo por la página de Facebook «SANMIGUELEANDO«. https://www.facebook.com/Sanmiguele.ando/
En su segundo día de estancia en San Miguel, se llevó a cabo una misa a las 8 de la mañana, a las 12 pm no fue posible (no pudo el sacerdote hacerla, estaba ocupado), y la siguiente sería a las 6 de la tarde.
En las medidas que se tomaron está: que la gente ya solo va a poder visitarlo desde afuera, solo ver la imagen y retirarse nuevamente a sus casas, no se puede quedar nadie ahí. También hay una carpa donde les están dando gel antibacterial antes de llegar a los reclinatorios.