Redacción
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SAN MIGUEL DE ALLENDE.- En la comunidad de San Lucas, los habitantes se pusieron «guapachosos» y decidieron realizar la fiesta del pueblo con feria y bailongo.
Sin embargo, el anuncio de la actuación del grupo Furia Norteña, alertó a las autoridades y por la noche llegaron a la comunidad que ya tenía el escenario para los «Reyes de los Huapangos y corridos» y los puestos de comida y juegos de destreza que formarían parte del Gran Baile de Feria.
Y así fue como llegaron los elementos de Protección Civil y de Policía que llegaron antes del bailongo y suspendieron la fiesta que se llevaba a cabo aún con el riesgo que implica la aglomeración de personas a causa de la pandemia por Covid-19.
Según un boletín de la presidencia, los asistentes se pusieron enojados por el tema y comenzaron a agredir a los elementos.
Por medio de un reporte anónimo a la Central de Atención a Llamadas de Emergencia 911, se notificó sobre este evento, de inmediato personal de Policía Municipal, Protección Civil e inspectores del Ayuntamiento arribaron a la comunidad donde corroboraron los hechos.
Cerca de 300 personas ya se encontraban reunidas, además de algunos puestos y un conjunto musical que se presentaría más tarde.
Las autoridades solicitaron a los asistentes desalojar el lugar, sin embargo, tomaron un comportamiento renuente y comenzaron a amedrentar a los servidores públicos, quienes tuvieron que abandonar el sitio para salvaguardar su integridad física.
Desde el 11 de enero en San Miguel de Allende se aprobó el acuerdo para la restricción de actividades productivas en el municipio tras el incremento de contagios y defunciones por Covid-19, el cual puntualiza la suspensión de eventos sociales y todo tipo de festividades.
El llamado a la población es a respetar las medidas sanitarias, actuar con responsabilidad y solidaridad para evitar el crecimiento acelerado de fallecimientos a causa de la pandemia.
