Redacción
Newssanmiguel@gmail.com
NACIONAL. – Comienza la escasez en distintos puntos del territorio mexicano, y entre los principales generadores están la canícula, la inflación, el cambio climático, la falta de insumos y la inseguridad.
En esta nota publicada por el medio digital Punto por Punto, señala que tanto Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC) como un experto en economía de la Universidad La Salle, analizaron el tema y coincidieron en estos factores.
Productos como la cerveza (en algunas presentaciones), el aceite, el agua embotellada, entre otros, comienzan a escasearse en la zona norte del país, debido a la falta de agua y de algunos materiales para la elaboración de sus embaces, teniendo como foco de alerta el estado de Nuevo León, que actualmente tiene problemas de suministro de agua potable.
El cambio climático afectó la producción de aguacate y limón, por la falta de agua. Algunos supermercados, incluso, no sacaron al mercado ciertos productos como estos porque son muy caros para la población y simplemente no se venden. Así se manifiesta una relativa escasez provocada por la inflación, explica el doctor en economía y profesor de la Universidad La Salle, Antonio Andrade.
«En el contexto de la canícula, la época más calurosa del año, hay cierto tipo de marcas de cerveza que se escasean en el mercado, principalmente en playas y costas, en el norte: Tepic, Chihuahua, Sonora, Sinaloa», detalla la ANPEC.
Pero la escasez no solamente es ocasionada por cuestiones climáticas o falta de insumos. Existen otros dos factores, la reduflación y la inseguridad.
Reduflación, sustitución y pérdida de calidad
Una de las estrategias que están siguiendo las grandes marcas para conservar sus volúmenes de ventas, en un escenario de alta inflación, es que ya no ofrecen las mismas presentaciones de productos que antes. Ahora, exhiben presentaciones más pequeñas, a un precio aparentemente más bajo que las presentaciones estándar anteriores al fenómeno inflacionario.
De la despensa mensual, a la de media semana
Cuauhtémoc Rivera, de la ANPEC, explica que, durante el siglo XX, era común que las familias mexicanas hicieran despensas que duraban un mes. Con la precarización, el aumento de la mujer en el mercado laboral y la falta de tiempo de la vida moderna, las despensas pasaron a realizarse de manera quincenal.
- No obstante, con la llegada del COVID, la inflación y la pérdida del poder adquisitivo llegó a la despensa de media semana y la sustitución de marcas premium, por las genéricas.
“Compras lo que comes a diario. Aquí, el rey de la colina es la tienda de abarrotes, ahora pasó a ser el canal de abasto esencial en el consumo diario”.
Por eso, la estrategia para los pequeños comerciantes es que los 24 productos del Paquete contra la inflación y la carestía, implementado por el gobierno federal, existan en un solo lugar, en todo momento y que los proveedores se comprometan a surtir a los pequeños comercios, estimó Cuauhtémoc Rivera, en un llamado para evitar el desabasto de estos productos.
Inseguridad, otro empujón para la escasez y la inflación
Tanto la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes como el experto lasallista consideran que la inseguridad es otro elemento que contribuye a la escasez de algunos productos, así como a la inflación, de manera indirecta. Lo hace a través de la extorsión a los productores (cobro de piso) y también por las afectaciones a las cadenas de suministro que provoca la delincuencia organizada.
Información: Punto por Punto. Ver nota original aquí.