Redacción
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Jennifer Mancera era la novia de Arturo Humberto, el estudiante universitario que en su camino a la escuela, fue asesinado por una bala perdida de hombres que arrojaron mientras se perseguían a bordo de dos vehículos. Y con un «no puedo creer lo que está pasando», se despidió de su novio.
Arturo, estudiante de la Universidad Politécnica de Guanajuato (UPGTo) y quien nació en la comunidad de Santa Rosa de Lima, en Villagrán, abordaba el autobús que lo llevaría a la universidad. Estudiaba para ser Ingeniero y de sus tres hermanos, él era el único que quiso continuar su escuela.
Pero la vida de Arturo no terminará ahí, pues una nota publicada por Milenio señala que su antes de irse, Arturo quiso convertirse en donador de órganos que ayudarán a dar vida a más de 80 personas, según relataron sus familiares. Será el primero en la comunidad que por años se mantuvo en vilo por el huachicoleo, que será un héroe después de muerto.
Hoy la comunidad universitaria estuvo de luto y los alumnos del campus en Cortazar vistieron de negro por el luto que tienen en la comunidad y según una nota de Zona Franca su rector Hugo García Vargas, rector de la UPG, destacó que en la actualidad son:
- 2,345 alumnos de Celaya
- 1,438 de Cortazar y
- 701 de Villagrán
Pero ningún municipio brinda transporte a los estudiantes, quienes deben caminar hasta 1 kilómetro desde la carretera Panamericana al campus y al salir de clase a las 8:00 de la noche ya no hay servicio a su lugar de origen.
Dijo que la falta de transporte ha provocado que los alumnos sean constantemente víctimas e la delincuencia al ser asaltados y al sufrir ataques violentos.
