Redacción
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Una parte del Cerro de los Picachos tiene 57 nuevos dueños. La división se realizó en asamblea ante representantes de las autoridades de la Procuraduría Estatal Agraria, del despacho de abogados de Querétaro que les ayudó a realizar los trámites para delimitar los terrenos, los ejidatarios y un notario.
Cada uno de los campesinos recibió desde ayer 6 hectáreas y Policapio Cázares, quien es señalado como el principal impulsor de legalizar la repartición de la tierra para que los propietarios hagan uso de su terreno y dijo ser presidente del Consejo de Vigilancia, dijo que a partir de ahora «cada quien puede hacer con su terreno lo que quiera».
En una encerrona que duró horas en un salón de fiestas de la salida Real a Querétaro, donde al menos 4 unidades de policía vigilaron la entrada, parientes (entre ellos hijos) de Policarpo Cázares hacían la labor de «cadeneros» y decían quién entraba y salía y a la reunión, y la delegada de Cabras-Juan Xidó, Viridiana Cázares (hermana de Policarpio) dialogaba y reía con los policías y les mostraba fotografías desde su celular y otros habitantes permanecían en la entrada esperándola salida, se llevó a cabo la asamblea que dijeron, no fue avisada de manera pública.
Uno de los ejidatarios salió del lugar y no volvió a entrar, al igual que el representante de la Procuraduría Agraria,quien por horas salió de la asamblea, subió a su auto y se retiró del lugar para volver cerca de la 2:00 de la tarde sin dar declaraciones.
La salida de los campesino, ya con sus documentos en manos, fue a bordo de unidades con los vidrios arriba y de la unidad donde viajaba Policarpio y la delegada (hermana) bajó también el Comisario Ejidal, Martín Guerrero, a quien pusieron a hablar para dar una declaración y al no saber responder, el hombre que se identificó como Florencio (Policarpio) Cázares contestó por él y fue quien dio la entrevista.
En ella reconoció que a partir de ahora los ejidatarios son dueños de 6 hectáreas de parcela y cada quien podrá hacer con ella lo que quieran, aunque por ahora se dedicarán a cuidar el lugar, el mismo en el que aceptó que hace casi 10 años quisieron vender para construir un Hotel de lujo con un campo de golf pero que no se construyó porque gente que identificó como «no ejidatarios» se negó a hacerlo.
«Los inversionistas vieron muchos problemas y mejor no quisieron hacerlo», dijo.
Desde ayer, la división de una parte de la zona de Los Picachos fue entregada a los ejidatarios y legalizada por la Procuraduría Agraria. En la zona de Cabras-Juan Xidó los campesinos son dueños de los terrenos.