El Banco Nacional de México, a través de Fomento Cultural Banamex, la Universidad Veracruzana, la Fundación Roberto Hernández Ramírez, A.C. y el Instituto Veracruzano de la Cultura inauguraron la exposición José Justo Montiel. Pintor Orizabeño, que se exhibirá desde febrero hasta el mes de abril en la Casa del Mayorazgo de la Canal, en el Centro Histórico de esta ciudad.
Presidieron la inauguración Patricia Cao Romero y Alcalá, Comisaria de la Colección de Pintura del siglo XIX y XX, Universidad Veracruzana y Gilberto Ramírez Toledano, Difusión Interna y Proyectos Nuevos Museos, Coordinación Ejecutiva, Fomento Cultural Banamex, A.C.
“José Justo Montiel, artista que nos convoca hoy, permite vislumbrar las valiosas colecciones que alberga el Museo de Arte del Estado de Veracruz. Desde Orizaba a la Ciudad de México, Durango y ahora San Miguel de Allende, las pinturas que presentamos han recorrido un trayecto que en tiempos pasados los más variados personajes entre virreyes, soldados, clérigos y artistas realizaban”, expuso la Comisaria de la Colección.
La obra de Montiel se dio a conocer en 1942 en la Galería Decoración de la ciudad de México, en una época en la que se iniciaba la revaloración del arte decimonónico realizado fuera de la capital de la República. Dos años después, se expusieron en el Palacio de Bellas Artes varios óleos del artista al lado de otros de pin- tores veracruzanos.
Los géneros en los que incursionó fueron el retrato, la pintura religiosa, el paisaje y el bodegón. Por su singularidad, se consideró que conformaban una “Escuela Regional Veracruzana”, en el entendido de que los pintores se habían formado sin ninguna inf luencia de la enseñanza académica y que su producción era ingenua o popular; no obstante, ahora se sabe que algunos de ellos sí tuvieron una formación académica. Uno de ellos fue José Justo Montiel, quien ingresó en la Academia de San Carlos, teniendo de condiscípulos a personajes como Tiburcio Sánchez, Fidencio Díaz de la Vega, Ramón Sagredo y Felipe S. Gutiérrez.
“No dudo que los fundadores de la dinastía del Mayorazgo de la Canal hayan pernoctado en Alipizahua, la de las alegres aguas, como se conocía a Ori- zaba. Nombro específicamente a estos personajes porque fue- ron los antecesores de Don Jo- sé Mariano Loreto De la Canal y Hervas, dueño original de es- te maravilloso Palacio que hoy, espléndidamente restaurado y convertido en centro cultural gracias a Banamex, alberga a las pinturas de José Justo Montiel”, añade Patricia Cao.
Montiel alcanzó una identidad artística propia. Sus obras tienden a separarse de las enseñanzas de su maestro catalán Pelegrín Clavé. En algunos retratos maneja con maestría las luces y sombras, con las que modela los rostros, y logra el parecido no sólo físico sino psicológico de los modelos que posaron para él. Sus paisajes son un testimonio del hermoso entorno veracruzano, región amada por el pintor.