Redacción
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SAN MIGUEL DE ALLENDE.- En una tarde que prometía ser tranquila, un giro inesperado de los acontecimientos sumió a la comunidad en la tristeza y el pesar cuando el joven Ángel Uriel cayó al asfalto luego de estamparse su motocicleta contra la unidad de emergencia.
«¿Qué pasó carnal, no que ibas a regresar 💔🕊️?», escribió en sus historias uno de sus amigos al despedirse de su amigo.
El domingo pasado, en las cercanías de las instalaciones del Cuerpo de Bomberos de San Miguel de Alldende, ubicadas en el bulevar Conspiración, se registró un trágico accidente.
Los detalles del incidente son desgarradores.
Según testigos, Ángel Uriel, en su intentó por adelantarse a la unidad que se dirigía a sofocar un incendio de pastizal, perdió el control de su motocicleta. Testigos presenciales relatan que intentó rebasar la unidad de emergencia en un momento crítico, cuando esta se dirigía a suministrar agua a una motobomba que trabajaba para contener el fuego en un pastizal de la Salida a Los Rodríguez.
Sin embargo, el destino tomó un rumbo trágico. Ángel, quien circulaba en su moto, al parecer sin su casco de seguridad, sufrió heridas mortales al impactar contra la pipa de Bomberos. A pesar de los esfuerzos rápidos y heroicos de los paramédicos presentes en el lugar, la vida de Ángel Uriel no pudo ser salvada.
Este lamentable suceso nos recuerda la importancia vital de tomar precauciones en la vía pública y no se te olvide el uso del casco de seguridad, una medida tan sencilla como crucial, que puede hacer la diferencia ante un accidente.
El vacío dejado por la partida prematura de Ángel Uriel nos invita a reflexionar sobre la fragilidad de la vida y la necesidad de velar por nuestra seguridad y la de quienes nos rodean en todo momento.
En momentos como este, extendemos nuestras más profundas condolencias a la familia y seres queridos de Ángel Uriel. Que encuentren consuelo en los recuerdos compartidos y la certeza de que su espíritu permanecerá vivo en los corazones de quienes lo conocieron.
