Redacción
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PUEBLA.- La noche del 21 de enero del 2022, en la zona industrial de Sanctorum, Puebla, Beberly Vega, una estudiante universitaria poblana, tomó un taxi de Uber para ir a casa. Su aplicación le dijo que la unidad la conducía Romeo «N», así que esperó su llegada a la zona perteneciente al municipio de Cuatlitango.
Subió a la unidad y «algo sospechoso» observó, por lo que pidió al conductor terminar con el viaje antes y le dijo que la dejara en la esquina de calle Río Atoyac y Revolución al lado de la junta auxiliar del municipio.
Según el relato de Beberly, Romeo “N” le negó bajarse cuando ella pidió terminar con el viaje y vio cómo se llevó la mano al pantalón, se quitó el cinturón y la amagó con un cuchillo de 20 centímetros y la hirió en una mano.
Cuando comenzaron a reñir, el chofer resultó con una cortadura en el meñique de la mano izquierda y otra en la frente. Beberly no pudo escapar y se golpeó con la puerta del vehículo, un Toyota Yaris de color gris.
Por lo menos 4 testigos vieron lo que ocurría y en 3 ocasiones llamaron al 911 reportando que había un hombre que estaba atacando a una mujer cerca de un Toyota, placas PRP463A.
Cuando llegaron los elementos de la Policía Municipal de Cuautlancingo, encontraron a Beberly Vega sometida por Romeo “N”, quien tenía una pierna encima de la joven.
Aquí la historia dio un vuelco y el chofer Romeo fingió desmayarse tras decir que Beberly lo había atacado.
Como México no deja de sorprendernos, fue Beberly QUIEN TERMINÓ DETENIDA ¿POR QUÉ?
Porque cuando llegó la policía para actuar, el chofer fingió desmayarse y dijo que ella lo había atacado, así que los polis, haciendo uso de su experiencia, se la llevaron.
Desde el 21 de enero, Beberly se la pasó en prisión.… por defenderse
SUs amigos y familiares comenzaron a organizarse, llenaron las calles de Puebla y su natal Veracruz en búsqueda de la libertad de Beberly que solo se defendió de una violación.
El fin de semana, una jueza dictaminó qu las pruebas llevaban a que ella actuó en legítima defensa y ella era la víctima no la «mala de la historia», como los policías y el chofer la habían señalado.
Beberly fue liberada mientras su papá decía: “Ella se defendió, sólo se defendió de una violación, porque si no lo hubiera hecho, la estaríamos buscando en una bolsa, sería una más como hay tantas”, sentenció.
Beberly Vega, Romeo “N” le negó bajarse cuando ella pidió terminar con el viaje en la calle Río Atoyac y Revolución de la junta auxiliar de Sanctorum en Cuautlancingo; vio cómo se llevó la mano al pantalón, se quitó el cinturón y la amagó con un cuchillo de 20 centímetros y la hirió en una mano.
Cuando comenzaron a reñir, el chofer resultó con una cortadura en el meñique de la mano izquierda y otra en la frente. Beberly no pudo escapar y se golpeó con la puerta del vehículo, un Toyota Yaris de color gris.
